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viernes, 19 de diciembre de 2014

La inolvidable campaña del primer “Campeón del Sur”

Revista Estadio
Hasta el año pasado -en que O’Higgins obtuvo su primer título en Primera División- Huachipato era el único equipo al sur de Santiago en haberse coronado vencedor de la máxima categoría del balompié nacional. Su mote de “Campeón del Sur” no es antojadizo. A 40 años de su primer campeonato, el acero sigue reluciendo a la espera de una nueva conquista.

1974 no es cualquier año para el fútbol chileno. No sólo para los hinchas de la zona, sino para todos aquellos que simpatizan por clubes que no pertenecen a la Región Metropolitana o Valparaíso, ya que fue la primera vez que un equipo al sur de Santiago se coronó campeón del balompié nacional.
Hace 40 años comenzó la gesta más grande que recuerdan los hinchas acereros. Su Huachipato, el que había ascendido a la máxima categoría del fútbol chileno en 1966, levantaba la copa tras ocho años en Primera División.
Comandado técnicamente por Pedro Morales, supieron sobreponerse a todas las circunstancias y al favoritismo de Palestino y Colo Colo, escuadras con que pelearon palmo a palmo por el título.

Torneo anual 

El debut fue auspicioso al derrotar a Deportes Concepción por 3-0. Segunda fecha y vino la primera caída, nada más ni nada menos ante el cuadro tetracolor (2-1). Hasta ahí parecía un inicio normal.
Luego se recomponen contra San Felipe; un empate con Gren Gross y tres victorias seguidas, para perder nuevamente, esta vez a manos de Unión Española.
El duelo ante Lota Schwager en Higueras aparecía como sustancial para volver al camino de los dos puntos. Los 2 mil 775 espectadores que llegaron al estadio presenciaron un empate en blanco.
La undécima jornada fue el desquite de la Usina. Los cuatro goles de Sintas para el 4-1 ante La Calera fue un aviso de lo que podía hacer en el campeonato el conjunto de Morales.
Nueve triunfos consecutivos tuvo el equipo de Talcahuano tras la igualdad ante los mineros. Sobresalen en ese periodo el 1-0 ante Colo Colo (encuentro que se suspendió debido a que los de Macul acumularon cinco expulsados), y el “Inobjetable triunfo”, como lo tituló El Sur al día siguiente del clásico jugado con Concepción el 15 de noviembre, en que los siderúrgicos derrotaron a los lilas por 2-1. La tabla indicaba que Palestino era el primero con 31 puntos seguido por Huachipato con una unidad menos.     
Fin de semana siguiente y los acereros desaprovechan la oportunidad de pasar a los árabes tras terminar 0-0 como local.
En la ronda 24 pierden con Antofagasta, pero sus “amigos” de Concepción le dan una ayuda y empatan con Palestino. En la fecha siguiente, los de Caupolicán Peña pierden estrepitosamente ante el Cacique, resultado que sirve para que los de la Octava Región queden como punteros.
El sueño parecía sumergiese luego del 0-3 ante Lota, pero se levantan con tres victorias en línea. La paridad en el Nacional contra Colo Colo a cuatro cotejos del final es tildada como “clave” por los fanáticos, producto de que si perdían, los albos volverían a la lucha por el campeonato.
Los vecinos choreros de Naval se encargarían de sacar a los de Luis Álamos del camino, mientras que Palestino seguía perdiendo puntos. 

Un día inolvidable 

La laboriosa campaña de 34 partidos tuvo sus frutos la tarde del 2 de febrero de 1975 en el viejo estadio Las Higueras. El recinto estaba colmado de hinchas y el cerro aledaño también se tiñó de los colores azul y negro.
“Estaba todo lleno, en el cerro había un montón de gente igual. En ese tiempo sólo había una galería, no estaba el estadio cerrado como ahora”,

rememora el defensor Carlos Cáceres.
“Cuando entramos en el estadio Las Higueras, estaba totalmente repleto, las tribunas y galerías. La alegría de esta gente es imborrable”,

asume emocionado el capitán y arquero del emblemático equipo, José Luis Mendy.
El rival de turno: Aviación, con 32 puntos no peleaba absolutamente nada. No querían ser presa fácil para el posible campeón y así lo hicieron sentir dentro de la cancha. 
Sin embargo, el acero fue más fuerte ese día. Minuto 27 y Moisés Silva patea un tiro libre. El arquero Leyton la manotea y rebota en su compañero Ulloa. Consecuencia: se inserta dentro de las redes. En contra de Ulloa o gol de Silva, da lo mismo, Huachipato era campeón, aunque se le pudo
escapar el título sobre la hora.
“Faltando poco para terminar, Honorino Landa -que había sido compañero nuestro- casi nos hace un gol porque entró solo y la punteó. Pasó rozando el palo”,

recuerda Mendy.
Destacaron en la temporada además de José Luis Mendy, el uruguayo Hugo Rivero, Eddio “Yeyo" Inostroza (que al año siguiente sería traspasado a Unión Española y jugaría la final de la Copa Libertadores), Guillermo Azócar, Francisco Pinochet y su goleador el uruguayo Carlos Sintas. 

Fuente: Entre Líneas

jueves, 11 de diciembre de 2014

Miguel Ardiman: “El básquetbol es mi prioridad”

Ardiman en Departamento de Educación Física de la UdeC | Foto: Nicolás Maureira
El joven que viste la camiseta de la Universidad de Concepción quiere enfocarse de lleno al deporte que practica y disfruta. Estudiante de Educación Física e hijo del ex jugador de Concepción y Universidad Católica, cuenta cómo se fue desencantando del fútbol cuando apareció en su vida el básquetbol. Su idea es dedicarse exclusivamente a ello, incluso lo prioriza por sobre su carrera.

Miguel Ardiman baja la escalera circular del Departamento de Educación Física de la Universidad de Concepción. Se reúne con amigos y conversan tras terminar una hora de clase. Eleva su mirada y se acerca a una banca verde para comenzar la entrevista. 
A sus cortos 22 años no se ve nervioso. Sus compañeros lo observan mientras él se sienta. Ninguna palabra o chiste alguno se oye por parte de sus conocidos. Pareciera que están acostumbrados a que como alero del equipo de básquetbol de la Universidad de Concepción sea requerido para este tipo de actividades.
El número 12 del Campanil no tiene problema alguno. No es primera vez que lo entrevistan. Sabe que su historia familiar es atractiva para contarla. 
Es hijo de Guillermo Miguel Ardiman Ramírez, ex jugador de Deportes Concepción, Universidad Católica, Santiago Wanderers, entre otros clubes. Su padre, más conocido en el mundo del fútbol por el segundo nombre, aportó en la consecución del primer título internacional de los cruzados al anotar un gol en la final de la Copa Interamericana. “Nosotros lo seguíamos a todas partes y viajábamos con él a las ciudades donde iba. Todos los fines de semanas íbamos a un estadio de fútbol. Siempre orgulloso de mi papá, me gustaba lo que hacía, entonces me sentía feliz que él pudiera vivir de eso”, señaló Ardiman hijo. 
El alguna vez seleccionado nacional fue importante en la formación de Miguel como deportista. Si bien se inició en el camino del fútbol en las divisiones menores de Huachipato, nunca se vio forzado a seguir el mismo sendero de su padre. “Nunca me dijo ‘por qué juegas básquetbol’. Todo lo contrario, cuando supo que llegué al equipo profesional me comentó lo orgulloso que estaba”, expresó.

Con respecto a tu paso en el llamado “deporte rey”, ¿pensaste que llegarías a ser un futbolista profesional? 

“En el fútbol mi papá siempre me apoyó, pero prefería que estudiara. Entonces nunca estuvo en mi mente llegar a ser futbolista profesional. En algún momento lo pensé, porque llegué hasta como la sub-15 de Huachipato, tenía posibilidades, pero cuando me cambié de colegio me costó ir a entrenar. Fue como en ese momento cuando me empezó a gustar el básquetbol”.

¿Qué te llevó a tomar la decisión de abandonar el fútbol y comenzar a practicar básquetbol?

“En el colegio una vez llegó un compañero a jugar streetball, que es como lo que hace la AND 1, y ahí me empezó a llamar la atención el básquet. Una vez hicieron unas pruebas para un campeonato joven que se hace siempre y me fui a probar. No me llevaron al campeonato pero me dejaron dentro del club de la U de Conce. Eso fue como sub-16. Desde ahí me encantó más este deporte. Además, me pegué un estirón grande igual”.

¿Cómo ingresaste al primer equipo de la Universidad de Concepción?

Cuando entré a estudiar Educación Física, el profesor que estaba dirigiendo en la Universidad me había entrenado cuando chico, entonces me llamó a la selección altiro, y como rendí, me puso a entrenar con el equipo profesional. Después de eso, me dediqué cien por ciento al básquet, estudiando y entrenando con el equipo profesional”.
¿Cuáles son tus aspiraciones en el futuro? ¿Priorizas más tu carrera como basquetbolista o como profesor de Educación Física?

“Para mí el básquet lo tengo como prioridad en este momento. Estoy tomando menos ramos. La liga está mejorando. El básquet en Chile se estaba muriendo, pero ahora está saliendo a flote, con una liga bien armada, mucho más competitiva, entonces se está dando todo para que mejore. Así como en el fútbol, me gustaría poder vivir de eso. Por lo mismo en este momento estoy sacando mi carrera y a la vez tratando de surgir lo más que pueda en el básquetbol”.

En las fechas que se han disputado en la Liga Nacional y que has sido convocado, te ha tocado partir como suplente: ¿eso te frustra o lo asimilas como una oportunidad?

“Es como un poco de ambos. Bueno es como una motivación en parte. Todos pasan por lo mismo. Están los mejores jugadores de Chile en el equipo, es difícil para el entrenador darte la oportunidad sin pasar a llevar a los más viejos, a los que tienen más experiencia. Hay que tener paciencia, casi todos pasamos lo mismo”.

¿Qué crees que debes realizar para ser titular?

“Lo de ser titular depende mucho también del profesor y de cómo tú entrenas. Ahora me ha costado un poco porque he estado bastante lesionado este año, no estoy al cien por ciento. Mis expectativas es estar siempre disponible, puede que se lesione gente y tienes que estar ahí para poder jugar. Bueno esta cosa a veces es muy injusta, puedes jugar bien y otras veces puedes jugar mal, depende de que si te toca tienes que aprovechar la oportunidad”.

¿Cuál es la lesión que tienes ahora y cómo afecta en el tema mental?

“La lesión es una pubalgia. La única forma de mejorar es parar, pero como debía jugar el Nacional Universitario, tuve que adelantar la recuperación. Ahora al volver a entrenar me molestó por no hacer el descanso que necesitaba. Son tres semanas y después volver con todo. Mentalmente te pone mal porque no puedo dar el cien por ciento, no puedo hacer pesas, me canso más rápido, por eso ahora decidí mejor parar y no estar al 50 por ciento de lo que puedes dar”.

Este año te coronaste campeón del torneo universitario Adesup, así como también los adultos de la Libcentro y Copa Chile: ¿cuál fue el campeonato que mejor celebraste?

En Adesup nosotros tenemos un plantel competitivo. Como casi todo el equipo entrena en el profesional, el universitario no significa tanto para mí porque nos enfrentamos a cuadros que de verdad se dedican a estudiar y que no están dedicados cien por ciento al básquetbol. La Copa Chile para mí fue importante porque venía con pocos minutos y en el cuadrangular final jugué harto, entonces ese ha sido el título más importante que he tenido. El profe que estaba, el señor Gabriel Schamberger, que llegó de Argentina, igual me había tenido desde de chico, entonces tuve bastante oportunidades con él”.

¿Cómo has tomado el cambio de técnico?

“El cambio de profesor ha sido difícil porque son distintas personalidades. Pablo Ares es un poco más duro, pero siempre las ambiciones han sido ganar. En este equipo siempre se busca estar dentro de los primeros lugares y salir campeón de todo lo que se juegue". 

¿Qué significa para ti jugar en la Universidad de Concepción? 

“A la U de Conce la empecé a mirar desde muy chico como espectador. Cada vez que jugaba de local la veníamos a ver. Estar ahí después fue como raro, conocía a todos los jugadores desde afuera y luego pasaron a ser mis compañeros. Jugar con Eduardo Marechal, Evandro Arteaga, que están aquí hace nueve o diez años y que yo los veo desde 2005, es muy gratificante. Fue una experiencia buena verlos desde afuera de la cancha y después tenerlos como compañeros y amigos”.

Por último, ahora que llevas varias temporadas como basquetbolista, ¿qué opinión te merece el fútbol y por cuál equipo hinchaste alguna vez? 

“Del fútbol ahora me desligué, como que me desencanté bastante por el tema de las barras, siempre están discutiendo por estupideces. Fui hincha de Católica, ya que fue la época más importante de mi padre. Bueno, del equipo que estaba nosotros teníamos camiseta, pero algún tiempo fui hincha de Católica”. 

Fuente: Entre Líneas

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Sampaoli, el “Mati” es chileno

Extraída en charlatécnica
A muchos de los fanáticos de Matías Fernández les molestó las palabras que el entrenador de la selección de fútbol de Chile entregó sobre el volante de la Fiorentina en entrevista con “Los Tenores” en Radio ADN.
Allí, Jorge Sampaoli dio a conocer las razones por la cual el formado en Colo Colo no fue llamado a la última fecha FIFA para los amistosos contra Venezuela y Uruguay el 14 y 18 de noviembre respectivamente. 
El casildense dijo que el “Pelusa” le faltaba mayor continuidad en su equipo. Los dichos del argentino contrastan con el presente del nacido en Buenos Aires en la actual temporada: hasta antes del 5 de noviembre (día en que se publicó la nómina de jugadores), Fernández jugó seis duelos de la Seria A. Una lesión lo dejó afuera contra el Udinese y en la banca ante la Sampdoria. Versus el Napoli, ya estaba de regreso en la titularidad.
Quizás las ausencias de esos dos partidos llevaron al cuerpo técnico a descartarlo de la convocatoria. Sin embargo, Matías ha disputado más encuentros que Francisco Silva, Pablo Hernández, Eduardo Vargas, jugadores que han sido recurrentemente requeridos por el DT para los amistosos tras Mundial de Brasil.
Es de esperar que las declaraciones del trasandino sean francas y no una excusa ante la pregunta de la prensa. Un jugador con las condiciones del ex-Villarreal no puede quedar fuera de la Selección y menos para la Copa América 2015. Sampaoli, el “Mati” es chileno.